

Los últimos días de septiembre y los primeros de octubre nos regalan una preciosa luz con unas temperaturas todavía suaves que nos permiten disfrutar de momentos al aire libre. Por todo esto, se ha convertido en la estación perfecta para celebrar una boda con todas las medidas de seguridad e higiene anticovid.
Además, su paleta de colores nos permite realizar una decoración cálida y acogedora. Son muchos los frutos y flores que solo podemos disfrutar en esta época del año y que nos van a proporcionar unos centros y una decoración preciosa.
El hecho de que la luz se atenúe y se valla antes, lejos de ser un problema, es una excusa perfecta para utilizar velas, en centros de mesa o para iluminar un camino o ese rincón especial que hemos diseñado.
Velas, madera y piñas forman un precioso conjunto que podemos utilizar como centro de mesa o para adornar un rincón especial.
Madera, piñas, calabazas, higos, uvas, hojas secas,… son muchos los elementos que podemos utilizar en esta época del año. Quedan especialmente bien los centros que combinan frutas, ramas y flores típicas como manzanas o naranjas con espigas de trigo, bellotas o grosellas combinados con flores tradicionales. La gama de marrones, naranjas, amarillos, ocres o rojos ganan la batalla a los rosas, blancos o azules más utilizados en la época estival.

Marrones, rojos y naranjas lo inundan todo, dando al ambiente un calor otoñal.
El ramo de novia o tarta nupcial también pueden adaptarse a los colores de esta época del año. Incluso el menú puede personalizarse con alimentos propios del otoño como los higos, uvas o castañas, tan típicas en Galicia.
Además, si el tiempo lo permite disfrutaremos de nuestros preciosos jardines y si no, da igual , porque con esta decoración nuestros salones van a estar tan bonitos que nadie va a querer salir. ¡Disfruta de tu boda en Santiago en Los Robles!