Aunque hoy en día tenemos la suerte de poder disfrutar de una gran variedad de flores durante todo el año, a veces es importante que las flores muestren la época del año en la que nos encontramos.
La importancia de escoger flores de temporada, aunque a priori nos puedan parecer triste en esta época del año, hace no solo que contemos con una gran variedad de flores y plantas menos conocidas, sino que conecta la ceremonia con la estación en la que se va a celebrar. Se trata de un guiño más.
Por ello hoy os traemos cuatro propuestas para los ramos de otoño que van más allá de una simple selección de flores. Flores que a lo mejor por separado no nos dicen nada pero que en conjunto forman una composición armónica y original y, sobre todo, con un aire muy otoñal.
Verde que te quiero verde
Ramos monotonales compuestos a base no solo de ramas y hojas, sino también de flores de tonalidades verdosas o tenues, que nos permite incluso incluir plantas crasas como las suculentas, que le aportan volumen a los ramos, aunque hay que tener en cuenta que se trata de plantas delicadas y con peso, por lo que debemos tener cuidado con la selección del resto de flores.
El eucalipto, rama de olivo, flor del cardo, brunias o la flor del algodón, son algunas de las variedades que podemos utilizar para estas composiciones.
Utiliza hojas y plumas
Como no podía ser de otra forma un ramo otoñal tenía que tener hojas secas. Podemos utilizar las grandes hojas del plátano o del magnolio pero también podemos optar por la sutiliza y colorido de las hojas del arce japonés, que darán un toque cálido y muy otoñal a cualquier ramo.
Otra opción es optar por plumas exóticas, como las del faisán o el pavo real, o, en su defecto, plantas que simulen la misma fluidez como las cortadeiras o hierba de palma, le dan un toque fluido y muy romántico, sobre todo en su variedad rosada. Se pueden utilizar solas pero lo más normal es que se utilicen intercaladas con flores de la misma tonalidad.
Las bayas y los frutos pueden ser un buen complemento
Otro elemento típico del otoño son las bayas que pueden ser un complemento perfecto para cualquier ramo, dando un toque de color y aportando volumen.
También podemos utilizar frutas típicas de la época, como manzanas o pequeñas calabazas. Sin duda un elemento original que hará de nuestro ramo algo único.
Pero sobre todo disfruta de los colores del otoño
Quizás lo más bonito de escoger esta época del año para ceñebrar nuestro enlace es la luz y el colorido que nos ofrece la estación. Y esos colores podemos llevarlos a nuestro ramo.
Combinando flores de gran tamaño como crisantemos, dalias o safari, con otras más pequeñas y delicadas como las anémonas, brezo o alstroemeria, pero sobre todo utilizando los tonos cálidos tan propios del otoño como los anaranjados, amarillos, marrones o rojos, sin olvidarnos del beige o cremas que complementarán a la perfección estas tonalidades tan otoñales, pero sin duda cálidas y muy muy románticas.
¡Como veis las posibilidades de una boda de otoño son enormes!
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